Rupturas
Celmiro Koryto
Poemas
Rupturas
Mi poesía está
armada de surrealismo, porque lo literal suele tener muchos significados, aunque
ordenado y obediente en su naturaleza. No suelo escribir cuando otros
poetas hacen silencio, mas su silencio inspira mi musa y hace gritar al poema -su
yo existo-.Duro y transparente como un
vidrio, trato de escribir de manera
intimista vestido de incógnito.
Rupturas
Es un
poemario casi fractal donde se cruzan realidades, desvelos, el absurdo irónico
y palabras que salen de un cargador, con balas de plata, formando versos que
hieren sensaciones.
La poesía,
es misterio incierto -salido de un cucurucho- mezclado en el gusto de un
helado.
La poesía,
es una llaga
necesaria…
Celia Gourinski
la mesa donde
escribo
tiene excesivas patas
cerceno algunas
para que sigan pares
dos más dos
suman el
resultado
que rige mis
manos
ahora/ las
piernas
ya no me
sostienen
un globo de locura
nada bajo los
pies
gestos de
invierno
en mí enferman
un ciclope
ridículo
reducido
a hierba
magra
camino al cielo
algunas veces
extravío
recortes de vida
principalmente
aquellas muertes mías
que nunca existieron
y amantes lluvias
lavaron
la incomprensión
posada en mis hombros
sólo por ésta
noche
cierra mis ojos
para que te vea
igual que ayer y siempre
encastrada en mi cuerpo
como dos peonías
vecina a un ave de invierno
y a un apagado fuego
silencios rasgan
el telar de la idea
convulsos gritos
deslucen fisuras
un oído sordo
vaga en la ciudad
a las tres de la madrugada
orinándose en sombras
ningún perro
patrulla las calles
tu lengua enmudece
de querer lo querido
desvanecida en la noche
de un palacio de invierno
sigues a su lado
muerta –pero viva-
y tus manos
remueven cabellos
como ceniza fría
ignoro todo
de saber
muchas cosas
vagando
días
infinitos
recuerdo una
terraza
a las siete
de la mañana
de un mar de
escarcha
decirte
quedamente
cuanto te
amo
el taxi que te
esperaba
no me llevó
dentro
correa sin tiempo
vaga idea de perro
con las
pestañas alzadas
vuela las
últimas nieves
entra en la
noche
que tú no
puedes
y despierta
en un punto
para tirar
los pesos
y vaciar el
pecho
sin espacio para llorar
como un niño
me suicidio
a diario
tengo un
lugar
donde soy
muchas cosas
a veces
también la luz
que un
espejo
retiene
en una celda
dorada
para pájaros
una historia
triste
sacude mi cabeza
el dios que me mira
es difícil captarlo
el amanecer
canta sus pesadillas
lo que da valor a mi cuerpo
es el espacio vacío
entre el barro
de mis costillas
palabras
cuelga en una percha
perdida en un árbol
en la noche sin eco
relee en penumbras
para doblegar
el dolor de su espora
cuando escribe
acusa
a ese alguien
que su lugar usurpa
todos somos
tiranos
esa tiranía
de hombre niño
penetra
nuestra carne tensa
desde niños
solitarios con el regalo
oso muñeca o caballo
los
hemos retorcido a desgano
secos de ruido
muertos de espanto
hasta que confesaron
destrozados
el amor
cobarde en la noche
huye como el agua
en círculos
deja entrar luz
antes de retirarse
por los canales
aferrado a piñas caídas
de un árbol de navidad
incierto
sin ningún instante
satisfecho
algo más que
besos
la anudan largo
a su inocencia feroz
de niña ninfa
mujer en esplendor
cubierta de intemperie
a la deriva
salva su sexo
de todo mal
en un delantal de vida
planea asesinatos de gozo
y vive entre dos labios
prósperos a florecer
su necesidad
es una vieja historia
vacía de nombre
vacía de hombre
vacía de bolsillo
vacía de calzado
algo cambiada
es ella misma
unida a una vida
que no le pertenece
como el sol
que viene de afuera
dos cuerpos
hacen el amor
a medida
se encienden
se apagan
como luciérnagas
en una noche
prieta de luz
rugiendo
con los cuellos alzados
acolchados en sus heridas
conquistan una mañana de
octubre
temprana
para despertar
su madre
abría las vísceras de un pez
para leerle el futuro
sin infectar sus manos
no alcanzaba la muerte
vivir fue costumbre
hasta que dejo de predecir
y el futuro la hundió
tras una ola
desde entonces
vive siempre triste
sin haber logrado
besar su cadáver
cierra la
puerta
para escribir a solas
como la madera
su mente cruje
y al garete
enfrenta
seres fantasmas
sufre su hambre
y sus guerras
desde el ojo
obligado a ver
de su insomnio
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